Entrevista con primer Director del Programa de Doctorado, Alejandro Díaz Mujica:
Con motivo del aniversario número 10 del Doctorado de Psicología, conversamos con quien fue el primer Director de este Programa para conocer más de sus inicios, de su historia, de sus objetivos, desafíos y logros alcanzados.
¿Cuándo empieza a desarrollarse la idea de desarrollar un programa de doctorado?
Quisiera partir diciendo que el Programa de Doctorado de la Universidad del Concepción es el resultado de un trabajo colaborativo que nació del interés histórico que ha mantenido la UdeC por la psicología y del desarrollo del Departamento de Psicología.
Las conversaciones iniciales sobre un programa de doctorado comenzaron alrededor del 2004 en la Comisión Nacional de Acreditación (CNA) con colegas de la Universidad Católica y otras Universidades mientras analizábamos las necesidades de investigación en Psicología y la oferta de programas de postgrado. Considerando el desarrollo que teníamos en la Universidad de Concepción, ellas preguntaban por qué no teníamos un programa de doctorado. En esa época había poco desarrollo de la capacidad de investigación en nuestra área en Chile.
¿Cómo avanzaron de las conversaciones a acciones más concretas?
Luego de varias conversaciones, en agosto del 2006 el Consejo del Departamento de Psicología aprobó por unanimidad la decisión de preparar un proyecto de Programa de Doctorado en Psicología.
En ese tiempo pocas personas tenían claro los requerimientos, las proyecciones institucionales y sociales de la formación de investigadores. En general, los licenciados tenían más interés en los cursos de postítulo.
En enero del 2007, la Dirección de Postgrado de la Universidad de Concepción manifestó que le interesaba el Programa de Doctorado en Psicología. Ese año, tuvimos nuestro primer proyecto de Doctorado en Psicología. Completo. Con fundamentación, plan de estudios, recursos docentes y normas. Pero el 2008 decidimos postergar su inicio, ya que apareció un concurso del Ministerio de Educación que ofrecía recursos para diseñar proyectos de Doctorado. Hicimos conversaciones con 4 universidades para preparar un proyecto conjunto y, finalmente, lo concursamos y ganamos con una de ellas. Para el diseño del programa tuvimos un gran aporte de universidades extranjeras y chilenas, también de la Dirección de Postgrado.
¿Entonces cuándo pudieron partir?
Partimos el 2011 y a poco andar obtuvimos financiamiento de un nuevo proyecto MECESUP (MINEDUC) para fortalecer la formación de estudiantes mediante estadías de investigación en universidades extranjeras y para traer profesores extranjeros.
¿Cómo se fue desarrollando el doctorado después de eso?
Tempranamente se unieron colegas investigadores del Departamento de Sociología, de las facultades de Educación, de Humanidades y de Medicina. Nuestro cuerpo académico no es solo de Psicólogos. Es y siempre ha sido un equipo multidisciplinario. Ha tenido un rol aportador al acoger a investigadoras e investigadores que no tienen programas de doctorado en sus disciplinas y el Doctorado en Psicología se ha potenciado con esa participación.
¿Cuáles eran los objetivos del Programa de Doctorado?
Fomentar las capacidades de formación de investigadores, generar conocimiento para dar respuesta a problemas sociales. Tempranamente el Doctorado se enfocó en bienestar y salud (mental) y, en enseñanza y aprendizaje. El Doctorado es un programa que se construye en forma colaborativa con sus estudiantes, con sus docentes y tiene por objetivo formar investigadores. Además, potenciar la investigación de las y los académicos de nuestra Facultad de Ciencias Sociales y de la Universidad de Concepción. Como telón de fondo ha estado atender problemáticas psicosociales con foco en educación y salud. Cuando decíamos eso, las autoridades nos respondían: “Sí, eso es relevante para la Universidad de Concepción”.
¿Quién dirigía el Doctorado?
Era dirigido por un núcleo de profesores reunido formalmente en el Consejo de Doctorado. Ese era el que le daba la dirección al Programa de Doctorado. Como Director, mi papel únicamente fue generar espacios y coordinar las iniciativas que surgían de las y los docentes, que, además, estábamos en contacto cercano con nuestros estudiantes. Se logró generar un espíritu de colaboración, donde abiertamente cualquiera podía proponer u oponerse. Ese era el espíritu, era la disposición de las y los docentes a colaborar. Diría que el principal logro fue hacer un trabajo colaborativo sistemático orientado a objetivos compartidos.
¿Cuáles diría que fueron o son las mayores dificultades?
Dentro de las dificultades, la principal ha sido y es generar condiciones para que los estudiantes dispongan de las condiciones que la Universidad de Concepción puede ofrecer para dedicarse a su formación y lograr formarse como investigadoras e investigadores en el tiempo prometido por el programa. Todos, unos más otros menos, tienen demandas de compromisos familiares, familiares, sociales, etc. Tienen un conjunto de presiones que le dificultan llevar a cabo el trabajo de formación en investigación.
Alejandro Díaz Mujica es Psicólogo graduado en la Universidad de Chile. Se formó como Terapeuta Familiar en el Instituto de Terapia Familiar de Santiago; destaca que allí uno de sus profesores fue Humberto Maturana. Obtuvo grados de Magíster en Educación (Universidad de Concepción), Doctor en Psicología (Universidad de Oviedo) y Doctor en Comunicación (Pontificia de la Universidad de Salamanca).
Actualmente colabora como investigador y Profesor Guía de tesis en el Programa del Doctorado de Psicología.